Cómo viajar solo de forma segura
Lo cierto es que somos muchos los viajeros y viajeras solitarios a los que nos hace felices viajar solos. Las ventajas son muchas: eres libre cada minuto de elegir donde y por cuanto tiempo quieres estar, los lugares que visitar, el tiempo que le vas a dedicar a cada visita, y que no vas a causar ninguna molestia a tu acompañante por estar 7 horas recorriendo un museo que a ti te apasiona y a él le horroriza, por ejemplo.
La soledad es uno de los mayores temores de las personas que alguna vez han pensado viajar en solitario. Y es algo que está muy arraigado en nuestro pensamiento, en la sociedad en general.
Muchas veces es nuestro propio entorno el que nos condiciona y nos limita a la hora de tomar la decisión de viajar solo. Pero normalmente la soledad se elige, y muchas personas no comprenden que puedes ser inmensamente feliz estando solo.
Todo parece muy lógico, hasta que echas en falta la protección solar en medio del desierto, o tienes una urgencia y no hay un hospital en un radio de 300km. Así que ser previsor es fundamental y te puede ahorrar más de un disgusto.
Por eso aconsejo hacer una lista de objetivos necesarios en tu mochila o maleta. Y días antes de viajar, tener todo listo y revisado para que no se olvide nada de lo absolutamente necesario.
EL ALOJAMIENTO
Sobre los alojamientos, yo recomiendo siempre llevar reservado en lugar de improvisar. Preparar un viaje para mi ya es disfrutar del viaje en si mismo, y elegir los alojamientos puede ser una parte entretenida y que te facilitará muchos las cosas en el destino. No solo por la seguridad, sino también por tener buena comunicación, o buenas vistas, o te permita estar cerca de los lugares que quieres visitar temprano, etc.
Ya sea un albergue, un hostel, una tienda de campaña o un hotelazo con piscina, conviene saber de antemano dónde vas a dormir, al menos la primera noche. Y otra cosas muy importante es llegar de día al destino y al hotel a ser posible. Así tendrás referencias claras de su ubicación, porque por la noche el paisaje urbano puede cambiar notablemente y sentirte perdido fácilmente.
En albergues y hostels conviene ser precavido. No te digo que te obsesiones con la seguridad, pero si llevas objetos de valor, déjalos guardados en un lugar seguro. Los alojamientos compartidos son ideales para viajeros solitarios, punto de encuentro de otros viajeros como tu, y suelen tener un ambiente muy agradable y divertido, donde hacer amigos y recibir consejos de viajeros que ya llevan unos días en el lugar. Pero siempre puede colarse algún amigo de lo ajeno, así que mejor prevenir que lamentar.
INTERNET EN LOS VIAJES
Puedes utilizar el wifi de tu alojamiento o del aeropuerto o la estación o los centros comerciales en momentos puntales.
Y si eres de los que no sabe vivir sin internet, hay compañías que te ofrecen tarjetas para determinados paises o zonas. O bien puedes comprar una tarjeta sim en el destino.
MUJERES VIAJERAS
Por eso voy a dar algunos consejos a las mujeres viajeras que quieran viajar solas, a demás de los citados anteriormente.
Tener una tarjeta sim es muy buena opción para tener comunicación en todo momento, y si te sientas amenazada o desprotegida, hacer una llamada o dar tu ubicación en tiempo real.
A veces es necesario adaptar tu forma de vestir a las culturas y costumbres de los países que visitas. Lo que para tí es el día a día, para otras personas de una cultura diferente puede ser una falta de respeto.
Evita el alcohol y las drogas. No digo que no te tomes una cerveza o un vino, pero evita en lo posible abusar del alcohol y no tener tus sentidos al 100% de su capacidad. Y respecto al contacto con las drogas, los problemas se acentúan. Además de anular tu capacidad de atención, te puedes meter en un lío legal y terminar en una cárcel de mala muerte, lo cual no tiene que ser una experiencia muy agradable.
Y por último, y esto ya seas viajero o viajera, disfruta de tu viaje al 100%, se responsable, y recuerda estos consejos para que tu viaje sea un éxito y sea lo más seguro posible.
¡Buen viaje!
P.D: todas las fotos de este reportaje son de mis recientes viajes al desierto del Sahara.
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